Dos victorias, dos empates y una derrota siembran ampollas entre la afición
La pretemporada de los de Lucas Alcaraz comenzaría con la ilusión de dar un salto de calidad. Tres fichajes de una calidad superior a la media de la plantilla como Iturra, Piti y Riki serían argumentos para esta atrevida opinión: en su tercera campaña en Primera, el Granada por fin estaba preparado para subir puestos en la tabla. Incluso hay quién piensa que Europa puede ser la meta.
No obstante, en el club siempre han sido cautos. Desde el entrenador hasta el último empleado han tenido claro el objetivo: la permanencia. Cuanto antes, mejor, y de ahí, a mirar arriba. Pero el objetivo es inequívoco: mantener al Granada en la Primera División.
Con esa mentalidad arrancó una pretemporada que comparadas con otras cada vez tiene más protagonismo del balón, así como de la táctica, dejando lo puramente físico en un plano más secundario que en otras temporadas. Se llegó al primer amistoso frente a La Hoya de Lorca, con un 2-0 claro, goles de Riki y Arabi.
El segundo encuentro tuvo lugar en Almuñécar frente al filial –armado con un equipo muy competitivo para la Segunda B-. Partido que finalizó con un empate a dos, dejando dudas entre los suplentes de Lucas Alcaraz, que reservó a los titulares para la flamante visita a Watford. Primera piedra de peso –a punto de ascender a la Premier el conjunto inglés- que se saldó con una derrota por dos goles a cero.
De vuelta a Granada, Lucas incidió en ensayar su once titular, formado por Roberto, Nyom, Diakhaté, Mainz, Brayan Angulo –a esperas de que se confirme la salida de Siqueira-, Mikel Rico, Iturra, Brahimi, Dani Benítez, Piti y Riki. Sería La Roda el siguiente equipo en pasar por los de Alcaraz, llevándose un contundente 6-1 en el que brillaron Riki y sobre todo Buonanotte. Al día siguiente se visitó al Hércules, en un partido que se saldó con empate a uno –tanto de penalti de Arabi-, pero que dejó una mala impresión del equipo granadino, y tal como informan los testigos de “Ideal”, dejaron la peor imagen de la pretemporada.
Así, se han levantado dudas y voces críticas de entre los aficionados, que se suman al mal resultado de la campaña de abonos de Quique Pina. También hay voces que defienden que no se deben sacar conclusiones de la pretemporada, ni positivas ni negativas, ya que hay muchos equipos que aún se encuentran atascados.
Lo cierto es que el Granada CF parece no dar con la tecla, algo que también ocurrió el pasado verano donde la falta de gol fue predominante, ejemplificado en el empate a cero contra los futbolistas parados de la AFE.
El inicio de la temporada está a la vuelta de la esquina y Lucas Alcaraz parece tener claro el once, con la incógnita de las posibles salidas de Siqueira y Mikel Rico, pareciendo la del brasileño la más probable. El aficionado rojiblanco debe dejar trabajar a los de Lucas, aunque su presión y dudas son comprensibles. La confianza del club en Lucas Alcaraz y su plantilla es plena, y la de los aficionados debería ser idéntica.