El entrenador del Granada volvió a sentarse delante de los micrófonos para analizar el nuevo reto que supone la visita de la Cultural y Deportiva Leonesa. La recuperación de jugadores importantes y la figura del psicólogo fueron preguntas de peso en la rueda de prensa del sevillano
El Granada sigue en esa «Eterna Lucha» que poco a poco se ha ido perdiendo y a la que restan sólo 21 unidades. Y es que, como si en un bucle temporal nos encontrásemos, Morilla regresó a la sala de prensa de la ciudad deportiva para avisar de los peligros de un rival inmerso en la lucha por no perder la categoría y repasar la semana rojiblanca. No fue fácil digerir el resultado de tablas a nada ante el filial hispalense. El objetivo se aleja, no lo suficiente como para bajar los brazos, pero lo justo para aumentar la ansiedad en plantilla, institución y entorno. Por ello, la principal figura -más allá del regreso de Darwin Machís- ha sido el coach psicológico que el club contrató para afrontar los bloqueos mentales de sus jugadores. «Esta semana hemos incidido en que se liberen. Está claro que el objetivo es el ascenso, pero en los partidos eso les puede generar cierta ansiedad. Tienen que centrarse en el juego y ver situaciones donde ellos han estado bien», comenzó diciendo Morilla, quien aseguró que el coach psicológico es una figura que funciona bien y se está utilizando mucho. «Conocíamos a Imanol de otras experiencias y todos han salido encantados. Todo lo que sea una ayuda para el futbolista es fundamental.»
Ya inmersos en lo deportivo, el técnico rojiblanco comentó que su principal objetivo esta semana era dar continuidad a lo que se había hecho bien atrás. «Estar bien defensivamente es uno de los objetivos, ya ante Osasuna y Sevilla el rival nos creó muy poco más allá de jugadas alejadas y algún córner. Otro objetivo es que el equipo se suelte y no tengan esa angustia que les impide por ejemplo dar un pase bien cuando son futbolistas que tienen calidad sobrada para ello. Es un trabajo mental, que ellos sepan que son muy buenos y recuperen su autoestima, porque aún queda tiempo suficiente», comentó el sevillano.
El otro actor principal en estos siete días no es otro que el extremo venezonlano, Darwin Machís. El entrenador reconoció su importancia pero quiso quitar presión al once diciendo que no llega a ser alivio «Las bajas desde que llegamos han sido importantes y eso era obvio. Jugadores como Machí o Adrián Ramos han sido muy determinantes. Darwin sabe que se equivocó y ha pedido perdón, ahora lo tenemos y tiene muchas ganas de ayudar. Pero los compañeros que han jugado en su posición lo han hecho bien. Adrián está en un punto físico que ya sí nos puede ayudar. La intención es que el domingo tenga más minutos» declaró Morilla. «Darwin lleva teniendo responsabilidad durante todo el año. Él ha desatascado muchos partidos y creo que no le pesa. Hemos intentado que el equipo no sea dependiente de uno o dos, sino más bloque. Sería injusto decir que vamos a ganar o a perder por Machís. Hay un equipo con buenísimos futbolistas detrás de él. Hay que liberarlo de que caiga toda la responsabilidad sobre él. Tiene que salir a jugar muy bien, como todos sus compañeros, y estaremos cerca de ganar si todos dan lo que tienen. El trabajo ha sido fenomenal toda la semana y el grupo está muy comprometido«, señaló en defensa de los suyos.
La afición es otro de los fichajes estrella que tiene pensado hacer el club, aunque los últimos resultados no animen por sí mismos. La campaña ante la Cultural, con la que se pretende llenar el estadio a precio de 5€ para amigos y familiares de abonados, resulta sugerente. «A la afición le digo que no todo es lo que se ve sólo el domingo, que los futbolistas intentan dar el 100% siempre. Si viera otra cosa lo diría, pero es que veo a 24 tíos que quieren conseguir el próximo objetivo que es ganar un partido de fútbol», diría Morilla antes de confesar que a la afición «se la reengancha mejor con victorias.» El entrenador tiene claro lo que pediría a la afición; «Que esté el domingo con el equipo como en una final. Cuando el jugador ve que su afición está con ellos, más allá de errores puntuales, lo agradece. Pido a la afición que durante el partido esté con los jugadores y luego, tras el partido, dicte sentencia y culpe al cuerpo técnico si quiere. La afición del Granada es maravillosa y el domingo tiene que estar. Ha estado en tiempos muy duros» añadió Pedro Morilla.
Su papel en el final de campaña puede incluso verse interrumpido por los resultados que se den, algo en lo que no piensa el sevillano. «No temo por mi puesto de trabajo. Me centro en trabajar día a día, al igual que mi cuerpo técnico. Lo demás está fuera de mi alcance. Estoy muy fuerte y sé lo que es el fútbol. Sé que el domingo el equipo saldrá a intentar que los tres puntos se queden en Los Cármenes. No sabemos si vamos a ganar, empatar o perder, pero estoy seguro de que si hacemos lo que hemos trabajado vamos a estar cerca de ganar. Lo de mi puesto no me afecta. La dirección deportivo nos ha dado su confianza y apoyo desde el primer día y nosotros estamos intentando responder al 200%«.
Para finalizar, Morilla volvió a mostrar pies de plomo al hablar de su rival. «Si ves a la Cultural ahí abajo, que ahora ha salido del descenso, dirás que el partido del domingo hay que ganarlo sí o sí. Pero ellos tienen un patrón de juego muy definido y llevan dos años con su entrenador. Hay cosas que las hacen muy bien y sin tener futbolistas de renombre saben perfectamente lo que hacer en el terreno de juego. A mi su juego me gusta como entrenador, aunque veo otros patrones en los que podemos hacerles daño. No va a ser fácil y van a venir aquí queriendo salir más del descenso y por eso necesitamos estar metidos en el partido y que la afición nos ayude. Si pensamos que va a ser fácil, nos estamos equivocando», concluyó el míster rojiblanco.
Foto: Granada CF | Pepe Villoslada