Entrevistamos al exfutbolista del Granada que ha pasado unos días en la ciudad de la Alhambra, un lugar especial que forma parte de su vida. El balear disfruta volviendo a jugar al fútbol en el Limassol chipriota aunque confiesa que siempre tendrá la puerta abierta al Granada Club de Fútbol

Se cumple el octavo aniversario del ascenso del Granada Club de Fútbol a Segunda División, una categoría que se recuperó tras 22 años transitando sobre el desierto del fútbol español, entre Tercera y Segunda B. Dani Benítez (Lloseta, Baleares, España, 7 de abril de 1987) es uno de los principales artífices de aquel retorno. Del primero a Segunda y del siguiente solo un año después -en 2011- con destino a la élite. No obstante, el balear fue una de las piezas clave del equipo entrenado por Fabri González para devolver el fútbol de Primera a la ciudad de Granada. El mallorquín, que tras pasar dos años sancionado cuando jugaba en el Granada en Primera, vuelve a sentirse futbolista en el Limassol FC, club de la máxima categoría del balompié chipriota. Aprovechando su visita a la capital de la Alhambra, en GranadaCFWeb hemos querido charlar con él.

¿Cómo ha vivido estos días por Granada?
He estado muy bien junto a mi hija y mi chica, he disfrutado viendo a amigos y familiares granadinos. Me sigue sorprendiendo, tras seis años fuera, el cariño que me transmite la gente porque no he parado de sacarme fotografías y hablar con aficionados que me piden continuamente que vuelva al club.

Se cumplen 8 años del ascenso de Alcorcón. ¿Qué recuerdos tiene de los dos ascensos consecutivos?
Es una experiencia única, lo han conseguido pocos equipos, piensa que es difícil conseguir uno pues imagínate conseguir dos consecutivos. No todo fue perfecto porque sufrimos bastante, sobre todo para salir de Segunda División B aunque tengo unos recuerdos magníficos y  eso nunca se olvida. Gracias a lo conseguido en el Granada CF, mi familia es andaluza y esta ciudad es mi segunda casa.

¿Qué tal la aventura en Chipre? ¿Cómo es el nivel futbolístico de la CYTA Championship?
Francamente bien. Hace un año, tras reencontrarme en Ferrol, decidí firmar dos temporadas con el Limassol pese a tener algunas dudas porque era mi primer año en el extranjero y no me arrepiento de la decisión tomada. La Primera División de Chipre no es lo mismo que la  Primera División de España, ni mucho menos, pero tiene un nivel muy parecido a la Segunda División. Es una competición compuesta por 14 equipos y hay seis o siete conjuntos muy competitivos. Sólo hay que ver el nivel del APOEL que ha jugado la Champions y se clasificó para los cuartos de final de la máxima competición, hace seis temporadas. Es una liga donde hay muchos españoles, en el AEL comparto vestuario con Manuel Torres y Joan Román, antes también estaban futbolistas como Piti o Arruabarrena. La gente se está marchando fuera porque las condiciones económicas son mejores en estos países emergentes.

¿Cuál es tu nivel futbolístico actualmente?
Bastante bueno, personalmente creo que he recuperado el nivel que demostré en Granada, estoy disfrutando de mi mejor estado de forma. El paso por Ferrol me ayudó a reencontrarme conmigo mismo y volver a sentirme futbolista de verdad aunque la competividad de 2ªB era diferente a la actual, esta competición exige un nivel superior y es bastante más fuerte. La directiva del AEL está muy satisfecha con mi fútbol desarrollado y me han ofrecido renovar dos temporadas más, quieren que esté ligado al Limassol hasta 2021. A nivel colectivo, hemos competido muy bien aunque hemos quedado quintos, a un paso de volver a disputar la fase previa de la Europa League.

¿Soñó con jugar la Europa League y enfrentarse a un rival español?
Por supuesto, siempre tuve la ilusión de volver a jugar al máximo nivel y disputar la Europa League era un sueño increíble. Caímos eliminados en tercera ronda frente al Austria Viena – los austriacos jugaron la Champions League en la temporada 2013-2014 – y conseguir el objetivo era muy difícil porque debíamos de superar cuatro eliminatorias antes de llegar a la fase final de la Europa League 17/18. Estuvimos cerca y me hubiese encantado disputar algún partido de este prestigioso torneo en territorio español con la camiseta del AEL.

Comentó en una entrevista pasada que «prometía volver a jugar en Segunda División». ¿Ha tenido la oportunidad de volver a jugar en la Liga de Fútbol Profesional?
En el pasado mercado de fichajes invernal varios equipos de Segunda División se pusieron en contacto con mi agente. Un club de la zona de abajo de la Liga 1|2|3 puso mucho interés en mi contratación aunque tras valorarlo con mi representante pensamos que la mejor opción era quedarme en Chipre. Estoy agusto en Limassol, no quería generar problemas a mi actual club y decidí no volver a España».

¿Qué puertas se abrieron tras volver a disfrutar del fútbol en Ferrol?
Cuando acabé la temporada con el Racing de Ferrol recibí varias propuestas formales, la mayoría del extranjero. Tuve varias opciones como irme a Polonia, dos equipos chipriotas y un conjunto de la Segunda División China; jugar en un lugar tan lejano no me daba confianza. En España recibí una oferta de un club potente de 2ªB, que está jugando actualmente el playoff de ascenso a 2ªA, pero la posibilidad de disputar la UEFA con el Limassol me empujó a firmar el contrato. Sabía que iba a tener opciones reales de jugar en Segunda esta temporada pero la previa de la Europa League comenzaba muy pronto y no dejé escapar la oportunidad que me ofreció el fútbol chipriota.

¿Te gustaría volver al Granada?
Siempre he sido muy sincero y nunca lo he escondido, me encantaría volver al Granada porque la gente continuamente me pide que vuelva, mis redes sociales estallan clamando mi retorno al club andaluz aunque no depende de mí.

¿Ha existido alguna toma de contacto con la directiva actual del Granada?
Sí, en diciembre hubo una ligera toma de contacto a través de mi representante debido a la necesidad de encontrar un extremo en la plantilla rojiblanca. Mi agente habló con la directiva actual aunque mi perfil no coincidía con la idea de traer a un futbolista joven, los directivos comentaron que el plan prioritario era traer a Andrew Hjulsager. Una decisión entendible y totalmente respetable.

¿Se ve capacitado para jugar en un equipo con aspiraciones de ascender a Primera División?
Totalmente capacitado, siento que he vuelto a recuperar mi mejor versión, por lo tanto podría formar parte de cualquier plantilla de Segunda División. Otra cosa sería hablar de las condiciones para analizar junto a mi agente si me interesa volver a España o no. Es cierto que actualmente sólo me veo jugando en Granada y si regreso a España mi prioridad sería hacerlo con la camiseta rojiblanca aunque tengo que reconocer que el fútbol da muchas vueltas.

¿Cree que aún puede aportar mucho al Granada Club de Fútbol?
He visto el 90% de los partidos del Granada porque soy un aficionado más del equipo, sinceramente con todo el respeto del mundo pienso que podría aportar muchísimo en el proyecto actual. Más que he luchado por esta camiseta no lo va a hacer nadie, porque el Granada y esta ciudad me lo han dado todo en mi vida, le debo mucho a este escudo.

La afición está dolida por la ausencia de granadinismo. ¿Eres consciente de la repercusión que significaría su vuelta al club?
Sí, la afición granadina siempre ha necesitado tener a jugadores que sean como ellos mismos, futbolistas que derrochen sentimientos, garra y coraje en el césped, después el fútbol es muy complejo y te premia o no pero ese carácter es innegociable. Tuve la suerte de formar parte de un grupo colectivo que será querido eternamente en el Nuevo Los Cármenes, viendo los tiempos actuales de este deporte no es fácil encontrar jugadores tan conectados con la grada como el grupo que formábamos aquellos años. Hay futbolistas que tocan la fibra sensible de la hinchada y el club necesita eso. Mi vuelta es complicada porque la actual directiva no quería mantener a nadie de la época anterior pero la afición siempre me ha reconocido por ser alguien como ellos.

¿Crees que ha pesado la etiqueta del ascenso directo?
La etiqueta del ascenso directo pesa mucho a jugadores y directiva. Los jugadores, directivos y diferentes cuerpos técnicos han hecho lo mejor posible para devolver al club a Primera División, no me cabe la menor duda de que todos han intentado al máximo conseguir los objetivos aunque a veces el fútbol es caprichoso. Los futbolistas somos los primeros que queremos ganar pero no siempre ocurre lo que buscamos. El Granada se puso ese objetivo porque si desciendes tras varios años en la élite, tienes que pensar en volver lo más rápido posible.

¿Hay alguna posibilidad remota de volver al Granada?
Sinceramente no lo sé, me queda un año más de contrato en Limassol; antes de venirme de vacaciones a la ciudad me pusieron encima de la mesa la renovación contractual durante dos cursos mas. Desconozco lo que puede ocurrir, no hemos vuelto a hablar con la actual directiva del Granada, nadie me ha llamado y tampoco debo pasarme todo el verano esperando una hipotética vuelta que no depende de mí. El 2 de julio vuelvo a la pretemporada en Chipre y firmaré el nuevo contrato si nada ha ocurrido antes.

¿Estarías dispuesto a sacrificar parte de tu contrato para jugar en el Granada la próxima temporada?
No me importaría sacrificar algo económicamente para volver a Granada porque ganaría en salud, estaría con mi hija y mi familia granadina, lo más importante de mi vida. Tengo muchas amistades en la ciudad y mis ganas de volver ahí están porque amo a este escudo.

Hubo publicaciones de una cena en la capital nazarí con amigos como Nyom, Kitoko y Mainz.  ¿Cómo fue el encuentro?
Muy bien, nos lo pasamos genial porque compartimos mucho tiempo juntos en el vestuario y nos tenemos un cariño enorme. Sabemos que somos referentes de la afición y eso es muy importante para cada uno de nosotros.

¿Hablásteis sobre la situación actual del Granada?
Por supuesto, como grupo que fuimos tenemos nuestra propia filosofía y lo que hablamos me lo reservo.