

La RFEF, que da por concluida las ligas regulares de fútbol no profesional, deja al conjunto rojiblanco sin el ansiado ascenso a la Liga Iberdrola.
Un punto, un solo punto, separaba al Granada Femenino del líder, el Santa Teresa. A tan solo 8 jornadas de finalizar la temporada y aún, con un partido clave por disputar, en tierras extremeñas, donde el conjunto de Roberto Valverde podría haber alcanzado la primera posición en la tabla. La decisión de la RFEF de dar por finalizadas las ligas de fútbol no profesional, deja al Granada Femenino sin el soñado ascenso a la Liga Iberdrola.
En el mejor momento del curso, cuando las buenas sensaciones cosechaban grandes resultados, llegó el parón de la temporada, debido a la crisis sanitaria por el coronavirus, poniendo en riesgo el duro trabajo realizado por las jugadoras rojiblancas. Con la esperanza de poder disputar lo que resta de curso, siempre y cuando las circunstancias fuesen favorables, la decisión de la RFEF, ha supuesto un fuerte golpe para el conjunto nazarí, que se queda sin posibilidad de ascenso a la máxima categoría, ocupando este hueco el Santa Teresa.
El acuerdo de la Federación llega sin haber aceptado el marco de diálogo con los clubes de Primera y Reto Iberdrola, solicitado por la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino. Por este motivo, son muchas las futbolistas que han mostrado su descontento, como Ana Romero, jugadora del Betis Féminas, que exponía en su cuenta de Twitter la falta de atención y prioridad de la RFEF al fútbol femenino.
La indeseada situación, no quita el mérito logrado, debido a la constancia y trabajo, que ha mostrado el Granada Femenino durante la temporada, reflejando la enorme calidad y posibilidades que posee el equipo. Las propias jugadoras han agradecido y enviado muestras de ánimo, a través, de sus redes sociales.